La receta es muy fácil y tienen un sabor riquísimo, en la receta pone que se le pone cebolla, pero como los que yo echaba de menos eran los de mi abuela y esos no veían la cebolla ni en foto pues se la he quitado y la verdad es que han quedado como los de toda la vida, jugosos y con bastante bacalao en la masa.
Aquí os dejo la receta para los que os animéis.
Ingredientes:
250 gr de bacalao desalado en migas
2 dientes de ajo
Un ramillete de perejil
2 huevos
25 gr de aceite de oliva
Una pizca de azafrán
160 ml de agua
Media cucharadita de bicarbonato (o una cucharadita de levadura royal)
170 gr de harina
Preparación:
Ponemos en el vaso el ajo, el perejil y el bacalao y trituramos unos 10 segundos en velocidad 5. Después añadimos el aceite y lo ponemos durante 5 minutos en temperatura varoma y velocidad 1.
Después se añade la harina, el bicarbonato, el agua, los huevos y un poco de sal si vemos que el bacalao lo necesita y mezclamos unos segundos en velocidad 6. En casod e que quede muy líquida la mezcla se añade un poco de harina y si queda muy espesa un poco más de agua, ya que la textura tiene que ser como la de una papilla espesa.
Se frien cucharadas de la masa en aceite muy caliente hasta que queden doraditas, se ponen a escurrir en un plato con papel de cocina y se sirven calentitas. Lo mejor es comerlas con un poco de miel de caña por encima, un verdadero placer para el paladar.
Espero que esta receta os guste, a mi me recuerdan a mi infancia en casa de mi abuela materna, sobre todo a la Semana Santa, y a mi abuela que por desgracia ya no está con nosotros, así que imaginaos que de recuerdos me trae este plato.
Gracias a todos los que me leeis, las visitas me animan a seguir con esto.
Un besote enorme y ya sabeis, a resistir!!
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